Se supone que todas las naciones soberanas deben tener un banco central y un mecanismo mediante el cual, en concierto, el estado, el gobierno y los demás poderes deben interactuar para regular, emitir, salvaguardar, una moneda que sea unidad de cambio, un acto de fe pública (luego que desapareció el respaldo del oro), facilitador del intercambio, del comercio, y ajustada a el sistema monetario internacional, de modo que resulte convertible en otras monedas de las naciones debidamente organizadas. En Europa llega a alcanzar envergadura supranacional al concertar ya a 17 paises (con la inclusión reciente de Estonia), en un mucho más complejo sistema que tiene como pulmón a Alemania.
En Estados Unidos la soberanía de la nación se pierde en una degeneración que incluye la inexistencia de un banco central propiamente dicho, no hay un nítido acto emisor soberano por parte del estado, se pretende hacer creer que se manifiesta la soberanía de la nación cuando se nombran algunos cargos de la red eufemísticamente denominada "reserva federal", pretendiendo ocultar que quien pone el tono y la música es un raro engendro que además de privado es tenebroso y secreto al que llaman la plutocracia que es el gobierno detrás de los títeres que juegan a ser presidentes de Estados Unidos.
Se dice que el engendro que en USA se denomina "reserva federal" fue originariamente gobernado desde Londres en una maniobra de retoma, especialmente a partir de 1913, por parte del grupo Rothschild, sus agentes y sus criados norteamericanos a los que financió (la mayoría de las grandes empresas y empresarios que hoy componen la casi totalidad de la columna vertebral económica de Estados Unidos; ejemplo: los grupos de los Rockefeller, los Morgan, los Harriman, los Carnegie, etc)
El sistema supranacional europeo (Euro en 17 de los 27 miembros de la Unión Europea) se rige por los bancos centrales del conjunto en concierto (soberanía emisora supranacional)
0 comentarios:
Publicar un comentario